Gan谷. Eso es lo que significan esas tres letras escritas en chino mandar赤n. Quiz芍s, tambi谷n fue lo primero que se le pas車 por la cabeza a John Metchie III al anotar su primer touchdown en la NFL. Veintitr谷s partidos y tres a?os, el receptor de los Houston Texans hizo aquello que llevaba deseando tant赤simo tiempo: llegar a la endzone. Un pase de 15 yardas de C.J. Stroud que Metchie atrap車 el pasado domingo por la noche. Un momento que borr車, aunque sea moment芍neamente, los obst芍culos de un viaje lleno de desaf赤os.
Metchie naci車 el 18 de julio de 2000 en Taiw芍n, hijo de madre taiwanesa y padre nigeriano, hacen que su linaje sea tan 迆nico como su propio estilo de juego. Cuando apenas ten赤a un a?o, su familia se mud車 a Accra, Ghana, y luego, en busca de mejores oportunidades, emigraron a Brampton, Ontario, Canad芍, donde Metchie creci車 junto a su madre y hermanos, mientras su padre continuaba en Ghana. La vida en Canad芍 le ofreci車 estabilidad y la oportunidad de descubrir su amor por el f迆tbol americano, una pasi車n que lo llev車 a destacarse en la escuela y luego a Estados Unidos, donde se comprometi車 con la prestigiosa Universidad de Alabama.
Ah赤 se hizo un nombre r芍pidamente. Durante su etapa en el College, gan車 en dos ocasiones el Trofeo Jon Cornish, un galard車n otorgado al mejor jugador canadiense de f迆tbol americano universitario, antes de dar el salto a la NFL. Los Texans lo seleccionaron en la segunda ronda del draft de 2022 con el pick n迆mero 44. Sin embargo, la vida tambi谷n lo seleccion車. Su primer gran rival lleg車 antes de pisar un terreno de juego.
Poco despu谷s de firmar su contrato de novato por cuatro a?os y ocho millones de d車lares, Metchie recibi車 una noticia devastadora: fue diagnosticado con leucemia promieloc赤tica aguda (LPA), un tipo de c芍ncer en la sangre y la m谷dula 車sea. Esta forma espec赤fica y agresiva de leucemia afecta la producci車n normal de c谷lulas sangu赤neas al acumular c谷lulas inmaduras, conocidas como promielocitos, en la m谷dula 車sea. El diagn車stico fue un shock. Los s赤ntomas de la LPA incluyen anemia, cansancio extremo, infecciones frecuentes y una vulnerabilidad elevada a hemorragias, poniendo en riesgo la salud e incluso la vida del paciente.
En lugar de practicar rutas y estudiar el playbook de Houston, Metchie pas車 los d赤as en hospitales, enfrentando tratamientos intensivos y enfrent芍ndose cara a cara con una enfermedad que afecta no solo al cuerpo, sino tambi谷n a la mente. Tras meses de tratamiento y de una recuperaci車n que dej車 a todos sus compa?eros y seguidores impresionados, Metchie regres車 al campo con los Texans en 2023.
Su vuelta fue una celebraci車n para el equipo, para los aficionados, y especialmente para 谷l, quien hab赤a vencido una de las batallas m芍s duras de su vida. Como receptor, su objetivo era alcanzar la zona de anotaci車n, y este fin de semana, finalmente, lo consigui車. Aunque Houston perdi車 el encuentro 26-23 contra los Detroit Lions, Metchie a迆n consigui車 arrancar una sonrisa a su entrenador en jefe, DeMeco Ryans, quien destac車 la dedicaci車n de su pupilo. "Estoy realmente orgulloso de su mejora, de c車mo asimila la orientaci車n de los entrenadores y lleva lo practicado al campo los domingos", coment車 Ryans.
Metchie ha tenido que abrirse paso en un deporte en el que pocos imaginaban que un joven nacido en Taiw芍n y criado en Canad芍 pudiera brillar. As赤 de especial es esta liga. No conoce de fronteras, solo de ilusi車n. La primera anotaci車n de Metchie en la NFL es solo el comienzo. Despu谷s de un a?o de pesadilla, ya puede volver a concentrarse en su carrera deportiva, que, si bien empez車 con una prueba devastadora, ahora se perfila como un futuro lleno de posibilidades.
Su primer touchdown representa una victoria m芍s all芍 del deporte, una victoria sobre el miedo, la adversidad y la enfermedad. Saborear cada yarda y cada catch es un regalo para 谷l y consigo, para cualquier aficionado a este deporte.
Aludiendo a sus or赤genes, hay un antiguo proverbio que dec赤a: "tener miedo a sufrir es ya en s赤 un sufrimiento". Ah赤 estuvo siempre la clave de Mitchie para vencer a la leucemia..
?l nunca sufri車. Disfrut車 el camino hasta que lleg車 su momento.
